Y tu no ves que quiero seguir comiendote a besos

Leí una vez que querer mueve y detiene mundos. Y yo te quiero. Te quiero como para leer poemas de Benedetti a la luz del sol un 20 de enero porque si, y a besarnos con los ojos cerrados con unos cassette´s de música vieja. Yo podría enredar mis manos en tu pelo y cantarte bajito un tema de la Oreja de Van Gogh ¿por que no? Porque realmente me gustaría sentirme como en esos poemas de Benedetti, pero todo si es a tu lado. Y es que te veo con esos enorme ojos verdes y quiero comerte a besos, enterito, hacerte pequeñito en mis manos y llenarte de caricias hasta por en los codos. Es que me encantas. No tengo más nada que decir. Me encantas. Tan simple y claro como eso.. Todas estas clicherias es porque llueve.. Y es que cuando llueve las ganas de tenerte cerca se me suben al cuerpo, como esa excusa perfecta para invitarte un café y unos besos (mejor varios) o en el orden que tu elijas.